Perseguir el bronceado perfecto puede parecer una gran idea cuando tenemos 20 años, pero a medida que envejecemos, el bronceado perfecto y la exposición al sol sin protección pueden hacer destrozos en nuestra piel. Debemos aprender a cuidarla cada día para garantizar una piel brillante y de aspecto más joven a lo largo de los años. Cuando se trata de proteger el cuerpo del sol, es importante entender por qué la protección solar es imprescindible, independientemente de la edad o de la época del año.
Protege tu piel de los rayos solares
Para proteger tu piel, debes ser consciente de los rayos UVA y UVB del sol. A menudo vemos estas siglas en los productos para el cuidado de la piel, los cosméticos y la ropa, pero ¿sabes lo que significan?
– UVA = Ultra Violeta A (onda larga)
– UVB = Ultra Violeta B (onda corta) Los UVA y los UVB son dos tipos de radiación muy diferentes que pueden dañar la piel.
Los rayos UVB son responsables de las quemaduras solares y las cataratas, y pueden afectar al sistema inmunitario. Y lo que es más importante, los rayos UVB también contribuyen al cáncer de piel. El FPS le permite saber cuánto tiempo puede permanecer al sol.
El factor de protección solar (FPS) que se encuentra en nuestros productos de protección solar le da una idea de cuánto tiempo puedes permanecer al sol antes de que su piel empiece a ponerse roja.
Los productos con FPS están disponibles en varios niveles: FPS 15, FPS 30, FPS 50 y más. Así es como funcionan: digamos que tu piel empezará a enrojecer cuando te expongas al sol en sólo 10 minutos. Por ejemplo, si utilizas un producto con FPS 30: 10 minutos x 30 (FPS) = 300 minutos.
– El resultado: unas 5 horas de protección solar estándar si estás en la playa o bajo el sol directo durante periodos prolongados, ten siempre precaución con el protector solar y el factor de protección solar elegido.
Es importante no tener una falsa sensación de seguridad cuando se trata de la protección solar. La mayoría de los protectores solares están pensados para una exposición solar normal y corriente, no para un día entero bajo el sol directo. En la playa o al hacer ejercicio bajo el sol, deberías considerar un protector solar más fuerte que el habitual.
A continuación, algunos consejos sobre protección solar
- Aplicar siempre protección solar, sea cual sea la estación del año.
- Cuando compres productos de protección solar, busca siempre “protección de amplio espectro.
- La cantidad adecuada de protección solar para tu cuerpo es de aproximadamente 1 oz. (o 30 ml), que es lo justo para llenar un vaso pequeño.
- Aplicar el protector solar al menos 15 o 20 minutos antes de ponerse al sol. Si la piel ya está enrojecida por el sol, el daño ya ha comenzado.
- Utilizar una solución para la limpieza y protección de la piel como la Septomida.
- Es importante proteger todas las zonas de la piel expuestas, incluidas las orejas y las calvas, y llevar ropa protectora, como camisas de manga larga, pantalones largos y sombreros de ala ancha.
- Utilizar gafas de sol con protección UVA y UVB. No sólo pueden quemarse los párpados, sino que la exposición a los rayos UVB puede provocar cataratas.
- No creas que estás protegido en el coche. Los rayos del sol pueden atravesar el cristal.
- Acostúmbrate a reaplicar la protección solar cada dos horas, después de nadar o sudar en exceso.
- Aléjate del sol durante las horas más calurosas del día y busca la sombra en la medida de lo posible.
La exposición al sol sin protección es la principal causa del envejecimiento de la piel y del cáncer de piel. Debemos protegernos todos los días, sin dejar de tener un aspecto fabuloso, por supuesto.
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